Hoy en día una canonización es la declaración oficial de la Iglesia,
por medio de una decisión del Papa, de que una persona es santa,
que verdaderamente está en el cielo y que es digna de veneración
e imitación pública. El proceso comienza nombrando a la persona
“Venerable”, un“Siervo de Dios”que ha demostrado una vida de
virtudes heroicas. La siguiente fase es la beatificación, por medio
de la cual la persona recibe el título de “Beato”. Esta fase requiere un
milagro atribuido a la intercesión del Siervo de Dios. Para la cano
nización se necesita un segundo milagro, atribuido a la intercesión
del Beato y ocurrido después de la beatificación de la persona. No
se requieren milagros para los mártires. El Papa puede prescindir de
algunas de las formalidades o pasos del proceso.
CANONIZACIÓN
1. Historias o Lecciones de Fe
Los Beatos y Santos de América acompañan con solicitud
fraterna a los hombres y mujeres de su tierra que, entre
gozos y sufrimientos, caminan hacia el encuentro
definitivo con el Señor. Para fomentar cada vez más su
imitación y para que los fieles recurran de una manera
más frecuente y fructuosa a su intercesión, considero
muy oportuna la propuesta de los Padres sinodales de
preparar “una colección de breves biografías de los
Santos y Beatos americanos. Esto puede iluminar y
estimular en América la respuesta a la vocación universal
a la santidad”.
—Papa Juan Pablo II,
La Iglesia en América
(
Ecclesia in America
), no. 15
El prefacio y la mayoría de los capítulos comienzan con historias de
católicos, siendo muchos de ellos de Estados Unidos. Cuando es posible,
Introducción • xix