Letter
Carta del presidente del recién creado Subcomité para la Promoción de la Justicia Racial y la Reconciliación, 20 de noviembre de 2025
20 de noviembre de 2025
¡Saludos en el Señor! Me siento muy honrado y profundamente agradecido de aceptar el nombramiento como el primer presidente del recién creado Subcomité para la Promoción de la Justicia Racial y la Reconciliación. Esta responsabilidad la asumo con humildad y un profundo sentido de propósito.
Algunos se preguntarán: “¿Por qué yo?” Me gustaría aprovechar esta oportunidad para compartir un poco sobre mí y por qué este trabajo es tan importante para mí.
Creciendo en un pequeño pueblo del centro de Texas, mis padres me inculcaron—tanto con la palabra como con el ejemplo—la creencia de que cada persona es creada a imagen y semejanza de Dios. Mi comunidad era muy diversa, con familias de ascendencia afroamericana, alemana, checa y latina. Aprendimos, jugamos, rezamos y fuimos a la escuela juntos. Sin embargo, a medida que fui creciendo, empecé a presenciar la dolorosa realidad de cómo las personas se veían entre sí y se trataban de forma diferente.
De niño en una escuela católica, viví de primera mano el pecado y el dolor del racismo, una experiencia que nunca he podido borrar porque fue tan perturbadora. Con el tiempo, pude observar momentos en los que se toleraban prejuicios y discriminación, no solo en la sociedad sino también dentro de la Iglesia. Conocer sobre el Dr. Martin Luther King Jr. me inspiró profundamente; su valentía para hablar en nombre de quienes están en los márgenes reafirmó mi convicción de que podemos y debemos esforzarnos por ser mejores personas. Como afirma el Dr. King, “La injusticia en cualquier lugar es una amenaza para la justicia en todas partes”.
No pretendo conocer todas las respuestas a las injusticias y problemas en nuestra sociedad y en la Iglesia respecto a las consecuencias del racismo, pero sí creo que estamos llamados a ser más como Cristo cada día y a reconocer su imagen en todas las personas. Espero que, como presidente de este nuevo subcomité, pueda ayudar a dirigir nuestra atención sobre lo que aún queda por hacer para sanar el dolor causado por el pecado del racismo que aún existe hoy. La reconciliación sigue siendo necesaria para quienes son víctimas del racismo, pero también para quienes le han hecho daño de manera directa o indirecta a otros.
Gracias por confiarme esta importante misión. Espero trabajar juntos para promover la justicia, la sanación y la unidad dentro de nuestra Iglesia y sociedad.
En Cristo,
Monseñor Daniel E. Garcia
Presidente, Subcomité para la Promoción de la Justicia Racial y la Reconciliación